El relieve terrestre presenta constantes modificaciones debido a dos tipos de fuerzas: las que proceden del interior de la Tierra (procesos geodinámicos internos, generados por la tectónica de placas) y las fuerzas que actúan en el exterior (procesos resultado de los agentes erosivos). Las internas crean las formas del relieve al presionar las placas en que se divide la litosfera y provocan los terremotos y los volcanes, y los pliegues y las fallas, que pueden levantar montañas (orogénesis). Las fuerzas externas son las que, sobre todo, desgastan lentamente las formas del relieve ya existentes y, en ocasiones, originan otras. Ambas fuerzas modifican el relieve terrestre.
La erosión y la meteorización (alteración sin transporte), están producidas por diversos agentes que contribuyen al desarrollo de estos procesos externos, como ser el agua en sus diferentes estados, variaciones de temperatura, viento, organismos vivos, etc.
La sedimentación, es el proceso de
deposición de los materiales resultantes de la erosión.
Los productos son transportados y se acumulan gracias a la
acción de la gravedad. Las partículas
erosionadas son transportadas en medios fluidos, como el agua o el
viento. Cuando la energía del agente responsable del transporte
disminuye, las partículas son depositadas y se produce la sedimentación. Los
materiales, llamados sedimentos, se acumulan en áreas, casi siempre
cóncavas, denominadas cuencas de sedimentación. La mayor parte de estas áreas se
encuentran en los bordes de las placas litosféricas y, por esta razón, la
sedimentación suele darse bajo los océanos.
La sedimentación continental está relacionada con las
aguas de escorrentía , los ríos, los glaciares, los
lagos y el viento. En las cuencas, las partículas se depositan
sobre las que lo hicieron anteriormente. Como consecuencia de ello aumenta la
presión a la que están sometidos los sedimentos y se producen una serie de
fenómenos que modifican sus características. El conjunto de estos procesos se
denomina diagénesis o litificación, cuyo resultado es la formación de una
roca sedimentaria.